¿Qué haces ante las dificultades? ¿Te superas o te bloqueas?
Querid@s amig@s,
Me resulta cuanto menos curioso cómo es posible que ante un mismo hecho que acontece a distintas personas, cada una de ellas puede actuar de forma tan diferente… Así, ante un mismo percance, incidente o accidente, algun@s nos agobiamos y nos bloqueamos, sin saber qué hacer ni a donde ir, mientras que otr@s nos reactivamos, lo tomamos como una oportunidad, como un reto y nos ocupamos en buscar soluciones, tirando de nuestra creatividad.
La respuesta que damos depende de nuestras creencias, del concepto que tenemos de nosotr@s mism@s, de nuestros rasgos de personalidad, de nuestra historia de vida, aprendizajes, cultura en la que vivimos,… y, fundamental, de nuestra actitud ante la vida (¿responsables o víctimas?, ¿positiva o negativa?).
Hoy me apetece compartir con vosotr@s la siguiente reflexión:
LA PIEDRA:
«El distraído tropezó con ella.
El violento la utilizó como proyectil.
El emprendedor construyó con ella.
El campesino cansado la usó como asiento.
Para los niños fue un juguete.
David mató a Goliat, y Miguel Angel le sacó la más bella escultura.
En todos los casos, la diferencia no estuvo en la piedra, sino en la persona.
No existe piedra en el camino que no puedas aprovechar para tu propio crecimiento.»
¿Con quién te identificas tú de entre todos los personajes de este texto?, ¿Te gustaría ser otr@ personaje? ¿Por qué? ¿Para qué?